Te bendeciré con abundancia y te multiplicaré grandemente

“13 Porque cuando Dios hizo la promesa a Abraham, no pudiendo jurar por otro mayor, juró por sí mismo, 14 diciendo: De cierto te bendeciré con abundancia y te multiplicaré grandemente.” Hebreos 6:13-14
Usted tiene la bendición que se va a multiplicar, la prosperidad financiera y el maligno no lo puede tocar porque tiene autoridad espiritual sobre toda fuerza del mal.
Estudiando a los patriarcas, podemos ver que siempre le envidiaron la prosperidad. Siempre la prosperidad es envidiada, porque es prosperidad de Dios en su vida y el diablo trabaja a través de otras personas. Esto vendrá porque es una promesa de Dios que será bendecido con abundancia y lo multiplicará grandemente.
Cuando empieza a ver el poder de la bendición, la autoridad espiritual, la gracia que tiene y la unción para reinar, usted tiene gozo todo el tiempo. En cambio si le da lugar a las circunstancias, al pasado y a las cosas que no vienen de Dios se va a entristecer. Pero si le da lugar a Dios y a la bendición de Dios, se va a gozar y va a manifestar autoridad espiritual, los demonios lo van a respetar, va a reinar en vida juntamente con él.
Proverbios 10:22 dice. “La bendición de Jehová es la que enriquece, y no añade tristeza con ella.” Nunca puede entristecerse.
Después del fracaso con Adán Dios encuentra a la vasija correcta en Abraham. Era alguien que le creía por fe, caminaba en obediencia y en fe a la palabra. La vida de Abraham impresiona desde que es llamado a la promesa de tener una descendencia. No sólo caminó en fe y le creyó a Dios, sino que entrenó a su familia para vivir así. Entrene a sus hijos y a sus seres queridos, con la Palabra de Dios, no les hable de las cosas ocultas de su pasado. Pero fíjese que lo de Abraham no fue instantáneo, fue un proceso y la vida bendecida va a en crecimiento y no se la puede robar nadie.
Todo lo que va recibiendo de los principios reveladores de la Palabra es para trasmitirlo, para que caminen en una vida bendecida. Usted vive en una generación donde cada creyente tiene que mostrar los cielos a la tierra, tiene que revelar la gloria de Dios. Lo que usted está recibiendo es para reinar sobre cosas que todavía lo manejan a usted.
Hoy la promesa de Dios a Abraham también se cumple en usted, no la olvide: “De cierto te bendeciré con abundancia y te multiplicaré grandemente.” Recíbala, créala y se manifestará en fu vida y en la de su familia. Lo que usted recibe es para transmitirlo a otros y sobre todo a sus generaciones.
Oración: Padre, gracias por la promesa que me diste, hoy la recibo, la creo y por fe sé que se cumplirá en mi vida. La transmitiré a mis generaciones porque sé que serán poderosas en tus manos. Hoy mi vida está rendida a ti y mi deseo es hacer tu Voluntad. En el nombre de Jesús, amén. Por. Rev. Juan O. Crudo, Argentina.