Al morir Jesús en la cruz y resucitar de entre los muertos demostró el amor que tenía para con nuestra vida. Él no miró que nosotros habíamos pecado, que nos habíamos alejado de Dios, su amor fue más allá. Su amor es incondicional. Hoy hay algo muy importante que tiene que tener en cuenta y es que usted es el objeto del amor de Dios. Porque por usted murió Jesús y eso lo tiene que valorar. Es la expresión de amor más grande que puede existir.
Porque el mismo Jesús lo dijo: Nadie tiene mayor amor que este que aquel que pone la vida por sus amigos. Él la puso por usted y por mí. Hoy podemos decir somos libres de la condenación y de la culpa. Observe estos cuatros puntos que nos enseñan algunos de los beneficios de tener el amor incondicional de Dios en su vida.
El amor de Dios es para que usted se convierta en un hijo de Dios. Usted tiene que afirmar y consolidar eso en su vida mirándose a sí mismo con los ojos de amor como Dios lo mira.
El amor de Dios le da acceso a vivir para siempre con él. No hay nada ni nadie que lo pueda separar del amor de Dios que es en Cristo Jesús.
El amor de Dios le permite recibir todos los beneficios de un heredero. Para que usted disfrute de esos beneficios en todas las áreas de su vida y los canalice con la unción, la gracia y el favor que Dios depósito en su vida.
El amor de Dios es revelado en usted para que sea coheredero con Cristo. Lo que tiene Cristo lo tiene usted. Ese es el amor de Dios que está fluyendo en forma permanente por el Espíritu Santo en la vida del creyente.
Dios quiere manifestarse a través de su vida. Reciba ese amor incondicional y derrámelo sobre otros. Dios lo creó con un propósito muy grande y para que sea de bendición.
Oración: Padre, gracias por ese amor tan grande que has puesto dentro de mí. Disfrutaré de todas las bendiciones que me has dado y la transmitiré a otros también. Te amo, en el nombre de Jesús, amén. Por. Rev. Juan O. Crudo, Argentina.
Porque el mismo Jesús lo dijo: Nadie tiene mayor amor que este que aquel que pone la vida por sus amigos. Él la puso por usted y por mí. Hoy podemos decir somos libres de la condenación y de la culpa. Observe estos cuatros puntos que nos enseñan algunos de los beneficios de tener el amor incondicional de Dios en su vida.
El amor de Dios es para que usted se convierta en un hijo de Dios. Usted tiene que afirmar y consolidar eso en su vida mirándose a sí mismo con los ojos de amor como Dios lo mira.
El amor de Dios le da acceso a vivir para siempre con él. No hay nada ni nadie que lo pueda separar del amor de Dios que es en Cristo Jesús.
El amor de Dios le permite recibir todos los beneficios de un heredero. Para que usted disfrute de esos beneficios en todas las áreas de su vida y los canalice con la unción, la gracia y el favor que Dios depósito en su vida.
El amor de Dios es revelado en usted para que sea coheredero con Cristo. Lo que tiene Cristo lo tiene usted. Ese es el amor de Dios que está fluyendo en forma permanente por el Espíritu Santo en la vida del creyente.
Dios quiere manifestarse a través de su vida. Reciba ese amor incondicional y derrámelo sobre otros. Dios lo creó con un propósito muy grande y para que sea de bendición.
Oración: Padre, gracias por ese amor tan grande que has puesto dentro de mí. Disfrutaré de todas las bendiciones que me has dado y la transmitiré a otros también. Te amo, en el nombre de Jesús, amén. Por. Rev. Juan O. Crudo, Argentina.
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